EL SENTIDO DEL DOLOR: "UNA OPORTUNIDAD PARA ENCONTRAR A DIOS"

En el video llamado “El sentido del dolor (una oportunidad para encontrar a Dios), aparecen diversos personajes:

           

1.      Un aparejador, que cuando le queda poco para terminar su carrera, le diagnostican esclerosis múltiple.

2.      Una mujer cuya hija está enferma de espina bífida.

3.      Un hombre que pierde a su mujer, teniendo 3 hijos y cuando el pequeño de ellos sólo tiene unos meses.

4.      Un abogado que se quemó casi todo su cuerpo cuando apenas tenía 16 años.

Los distintos personajes van relatando su experiencia, y como han aprendido a afrontar la situación del dolor de la cual según ellos nadie puede escapar. Los 4 coinciden en que el sufrimiento es una experiencia segura en la vida de cada persona.

           

Todos están de acuerdo  en que el dolor se puede acepta, y es en esta aceptación como la persona se enriquece. Esto no quiere decir que se entienda, ya que la pregunta de “por qué me ha tocado a mí” surge continuamente.

            Pero si se acepta esta situación, se puede ser feliz, ya que cómo comenta el abogado, nadie que huya del dolor puede ser feliz. Y solamente si el dolor se acepta con esperanza, uno puede ser feliz en sus circunstancias particulares.

            Según algunos de los entrevistados, saber sufrir es aceptar las contradicciones de la vida, a veces como dice el aparejador, aprender a sonreír cuando a uno le cuesta, o como dice el padre de familia, ver con una perspectiva distinta lo que acontece, viendo que ello nos ofrece una posibilidad de transformación, y esta transformación es hacernos más humanos, fijarnos más en los demás.

            También el abogado apunta que el dolor es una medicina que fortalece, y que modifica radicalmente la vida de la persona que sufre y de aquellos que la acompañan.

 La madre de la niña con espina bífida apunta que uno se da cuenta en la experiencia del dolor como otros apoyan y están ahí para todo, que uno experimenta el calor de la compañía de otros que no esperan nada a cambio.

            Todos afirman  que la experiencia de sufrimiento que han tenido en su vida, ha cambiado su vida radicalmente y que han aprendido poco a poco a vivir esta situación con esperanza y que un hecho que ha posibilitado esto, ha sido su experiencia de Dios.

            Según algunos de los entrevistados, cuando ofrecemos a Dios nuestro sufrimiento, Él lo transforma.

            Otro apunta a que el hecho de que Cristo quiera morir en la Cruz, significa que el sufrimiento es útil, santificante.

            Además todos coinciden igualmente en que el dolor es una experiencia enriquecedora que te lleva a Dios.

            Las distintas experiencias de fe que han tenido a lo largo de este tiempo, les han revelado como Dios ha estado presente en sus vidas y les ha acompañado en estas circunstancias particulares, muchas veces manifestándose a través de personas, y otras veces de manera directa, poniéndoles en situaciones en las que han visto su mano. Así el padre de familia cuenta como poco después de morir su mujer, tiene la oportunidad de poner en una capilla en la que estaba trabajando la imagen de María y tiene la experiencia profunda de su amor, de cómo él desea en esas circunstancias en las que acaba de fallecer su mujer poner la corona a María, fiarse de ella, poner su vida y la de sus hijos a sus pies.

   Desde estas líneas os invitamos a ver este documental, que invita a una honda reflexión sobre el misterio del dolor.  El dolor no se entiende, se acepta, y muchas veces el intentar entenderlo hace que la persona se desespere, y que se mire al ombligo, siendo esta experiencia una fosa de la que no puede salir.

Pero cuando este dolor se acepta con amor, y se ofrece, fructifica. Como dice Jesús en el evangelio: “Si el grano de trigo cae en tierra y muere, da mucho fruto”. Y este fruto en muchas ocasiones no lo vemos en nuestra vida, porque nuestra visión es muy limitada, pero como dice uno de los entrevistados, si Cristo aceptó morir en la Cruz, si aceptó voluntariamente el sufrimiento, eso nos da una  esperanza.

 Descubrir que Dios pasó por él, convierte al sufrimiento en algo precioso a los ojos de Dios. Esta visión del sufrimiento hace que este  nos una a él y a nuestros hermanos,  nos facilita encontrarnos con aquellos que nada tienen, comprender a aquellos que sufren, ofrecerlo por aquellos que no conocen a Dios…